La construcción sostenible y la arquitectura ecológica está
cobrando un mayor impulso en estos últimos años alrededor del mundo. Estas no
solo ayudan al medio ambiente, sino que también ofrecen ventajas económicas y
sostenibles. Por lo tanto, esta práctica ha generado el interés de muchos,
contratistas, constructores y desarrolladores en desarrollar construcciones
sostenibles, por consiguiente, revisaremos algunas prácticas que comprueban que
la construcción sostenible ha tomado mucha fuerza en la actualidad.
De hecho, el futuro está en proyectos de construcción sostenible
que incorporen materiales naturales, limiten el impacto negativo del hábitat humano
en el medio ambiente y reduzcan el consumo de energía, eso ofrece la arquitectura
sustentable. Las edificaciones con capacidad de adaptarse al entorno natural,
con un hábitat inteligente y amigable con la salud de los habitantes y el
ambiente son la nueva tendencia en la construcción.
Según el World Green Building Council (WGBC) los edificios verdes desempeñaran un papel fundamental en la prevención de la COVID-19, algunas de las practicas que han permitido las apuestas hacia practicas de construcción sostenible son:
- Edificios Net-Zero: estos consisten en construir edificios cuyo consumo sea aproximadamente igual a su producción de energía, reducir las emisiones de carbono, el consumo de agua y los residuos solidos transportados a los vertederos. Además, estos proyectos buscan alternativas de generación de energía renovable dentro y fuera del sitio.
- Resiliencia climática: la industria de la construcción esta tomando medidas que permitan resistir los cambios climáticos y sus efectos, buscando métodos con el objetivo de aumentar la resistencia al clima de las construcciones para mitigar los posibles daños causados por este.
- Certificación Green Star: esta promueve alrededor del mundo diseños de edificios integrales que reducen el impacto ambiental, en la se recibirá una calificación para verificar si un proyecto comunitario es sostenible.
- Certificación LEED: es el sistema de clasificación mas utilizado a nivel mundial encargado de verificar si un edificio es sostenible y certificarlo.
- Sistemas de energía distribuida: permiten gestionar adecuadamente la energía de un edificio que conlleva beneficios como costos operativos reducidos, fiabilidad energética mejorada, huella de carbono reducida y fuentes de ingresos adicionales.
- Certificación EDGE: tiene como objetivo aumentar la eficiencia de la construcción en términos de energía, agua, materiales de construcción y residuos. También requiere que los desarrolladores se comprometan a reducir al menos un 20% el uso de energía y agua en comparación con un edificio estándar.
- Materiales de construcción alternativos: debido a la dependencia del uso de materiales no renovables que han tenido un impacto duradero en el medio ambiente y en la cantidad de recursos disponibles, los desarrolladores están en busca de materiales alternativos. Algunos de los materiales alternativos de se han venido usando son la madera, hempcrete, el plástico reciclado, el bambú y el Grasscrete.
Es bueno saber que haya prácticas de construcción
sustentables, que se estén usando en muchas partes del mundo y que a su vez estén
tomando mas fuerza. Estas nuevas tendencias de la industria de la construcción
aumentarán cada vez mas la idea de un desarrollo sostenible impulsando así a la
creación de iniciativas mas eficientes. Que una industria tan grande como la construcción
este buscando alternativas para innovarse y disminuir el impacto que tienen en
el ambiente es realmente importante y significativo para la sociedad y obviamente
para el planeta tierra, pues impulsan a las demás industrias a renovarse y así en
unos años lograr unas industrias mas limpias, mas sostenibles.
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